Gibson J-50 1947: un auténtico monstruo de la guitarra, con un aspecto de Frankenstein y un sonido para morirse.
¡Esta guitarra suena realmente increíble! La hemos analizado un poco para explicar la razón de este fenómeno. En primer lugar, la guitarra es ligera como una pluma, las maderas están tan perfectamente secas y maduradas que la guitarra tiene una resonancia increíble.
Pero también está equipado con los mejores materiales... abeto de alta calidad para la tapa y caoba de gran belleza para el fondo y los aros.
Pero la verdadera razón de su increíble sonido es el hecho de que esta guitarra tiene carácter y alma. A lo largo de los años, esta guitarra simplemente ha sido tocada, amada y siempre ha sido una fiel compañera. Cuando tocas esta guitarra, entiendes por qué ha sido reparada y devuelta a la vida a lo largo de los años... simplemente era indispensable.
Preguntas como: ¿Cuántas grietas tiene la guitarra? ... ¿qué se ha reparado? etc. ¡son probablemente las equivocadas!
Ni siquiera nosotros sabemos muy bien qué se le ha hecho a esta guitarra... pero una cosa es segura, es súper sólida y suena como una guitarra nueva. Esto se debe a que se le ha hecho un reajuste del mástil, un refret y un puente nuevo.
La guitarra ha sido ligeramente barnizada. Tenía un golpeador de madera en el lado izquierdo, que ha sido retirado.
Toda la estructura de la guitarra es estable y la hemos revisado a fondo: está lista para la siguiente fase y espera un nuevo hogar.
El FON en el interior está descolorido - 1947 fue el último año en que Gibson utilizó un logotipo con guión y el primer año en que construyeron el modelo J-50.
Se incluye un sólido estuche no original.
Un dato interesante es que Bob Dylan también tocaba una Gibson J-50 tan maltrecha en sus años mozos.
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