Esta guitarra clásica fue fabricada en 1980 por el maestro luthier Arcángel Fernández. Está considerado como uno de los mejores luthiers de la historia y sus guitarras son muy difíciles de conseguir ya que muchas de ellas fueron compradas por coleccionistas de Japón. Sus guitarras son admiradas por luthiers, coleccionistas y guitarristas de todo el mundo.
Nació en 1932 y comenzó su carrera como carpintero. En 1954 conoció al gran guitarrero Marcelo Barbero, considerado entonces el mejor guitarrero de Madrid y que había trabajado con Santos Hernández. Barbero y Fernández son figuras igualmente impresionantes en el mundo de la construcción de guitarras. El trabajo de Arcángel Fernández como luthier, por ejemplo, está en la base de lo que constituye la típica guitarra flamenca moderna.
Fernández fundó una tienda junto con Manuel Rodríguez, que también vendía algunos instrumentos de otros talentosos guitarreros. En 1959, el hijo de Marcelo Barbero se unió a él y trabajaron juntos durante 40 años.
La reputación de Fernández se extendió rápidamente y se convirtió en uno de los mayores fabricantes de guitarras del mundo. Más adelante en su carrera, Fernández, que fabricaba una media de ocho guitarras al año, dejó de aceptar pedidos de sus instrumentos porque la lista de espera era demasiado larga. Hoy en día, sus bellas creaciones son veneradas y se le tiene en gran estima por lo que ha conseguido en el campo de la fabricación de instrumentos musicales.
Esta guitarra está equipada con maderas de la más alta calidad disponible. La tapa de abeto tiene una veta recta y uniforme en toda la superficie, mientras que los aros y el fondo son de palisandro de alta calidad.
La longitud de la escala es de 655 mm y la anchura de la cejuela de 52 mm.
El sonido de esta guitarra es espectacular, con una calidad potente y una gran resonancia. Tiene una plenitud en los graves y una claridad y melodía sorprendentes en los agudos. La calidad del volumen y la personalidad de la guitarra elevan este instrumento a la máxima categoría de las guitarras clásicas.
El estado es como nueva. La guitarra fue encargada por un coleccionista a Arcangel Fernández y recogida en Madrid.
Rara vez se tocaba, siempre se trataba con respeto y se guardaba perfectamente.
La jugabilidad y el estado de conservación son del más alto nivel.
Viene con el estuche original de la guitarra.
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